Bizcocho de coco y piña

No sé si pasa sólo a mí o es algo general, con el calor del verano como que no me apetece chocolate... el cuerpo  me pide sabores más fresquitos, sobre todo limón! Recuerdo cuando era pequeña y  mi madre al volver de la compra traía esas galletas de limón ufff Bocaditos de limón, pues este verano en la Graciosa mi madre vino de la compra con una ¡caja! ¡qué buenas estaban! Igual o mejor que como las recordaba. Una perdición. 

Además del limón también me apetece el coco, la piña... ¿por qué suenan tan veraniegos? Con esa idea en la cabeza y con ganas de hacerle algo a mi amiga Lamone, me puse a buscar por la red y di con varias recetas interesantes, que han pasado a engrosar las recetas futuras, de todas ellas ésta fue la receta seleccionada: 

BIZCOCHO DE COCO Y PIÑA (Del blog Cuinant)

INGREDIENTES

• 4 huevos
• 250 gr. de azúcar
• 100 gr. de aceite de girasol
• 1 yogurt natural o de piña (no tenía y usé 130 gr de buttermilk casero)
• 125 gr. de coco
• 75 gr. de harina
• 1 sobre de levadura royal 
• 3 cucharadas soperas de mermelada de piña 
• un poco de mermelada de piña para pintar por encima
• coco para espolvorear

Visto desde arriba, parece una rodaja de piña ¿verdad? cubierta de coco rallado

ELABORACIÓN

Precalentar el horno a 180º, calor arriba y abajo.

Batir los huevos con el azúcar hasta que queden espumosos, añadir el aceite y el yogurt , y volver a batir un poco.

A continuación añadir el coco, mezclar bien y tamizar la harina y mezclar. Añadir la mermelada de piña e integrar, pero no del todo.

Hornear unos 30-40 minutos, yo lo tuve unos 40 minutos en un molde de 23 cm.

Una vez horneado y desmoldado untar con una capa de mermelada y espolvorear con coco.

Notas:

Al desmoldarlo me sorprendió al ver que era mucho más jugoso de lo que me esperaba, también es verdad que yo no integré mucho la mermelada con la masa del bizcocho, la próxima vez voy a integrarla más a ver cómo queda, porque así quedó muy rico, me gustó mucho.

A pesar de llevar bastante coco y piña, no tenía un fuerte sabor a ninguna de las dos frutas, si no una mezcla muy rica. 

A nosotros no nos lo pareció, pero por ejemplo a mis amigos alemanes les pareció que era demasiado dulce, así que si eres poco amigo del azúcar añádele algo menos que ya la mermelada le aporta dulzor.